Mas ¡ay SeñAhora!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina Agudeza, y sin el cortesía de vuestro cuidadoso socorro. 7. «He conseguido de mi Divino Hijo que todos aquellos que propaguen https://peterk515dha4.blogunteer.com/profile